El cisne y el agua. La Granja, Segovia. Diciembre 01 – Canon D30, ISO 400, f 4,5, 1/640
Menos en más en fotografía: cuanto más simple dejas la escena, más posibilidades de que la atención se centre en el objeto principal. En esta composición, el fondo prácticamente negro, junto con el contraste con el cisne, crean el motivo de la fotografía. Un teleobjetivo es básico para aislar el objeto y lograr la compresión necesaria.
La cámara utilizada es una Canon D30, una anciano modelo, en concreto el primero que Canon sacó al mercado en el año 2000. Muchos megapíxeles han llovido desde entonces, pero pocas cosas han cambiado a la hora de componer las imágenes.
Hay 4 comentarios
Preciosa foto, quiza hubiera sacado también el reflejo de la cabeza en el agua.
Saludos.
No te falta razón: pero me hubiese obligado a componer verticalmente la foto. Lo cual evito siempre que puedo pero es que además en esta ocasión el cisne se movía y la composición variaba
Estoy de acuerdo, los megapixeles no mejoran tanto la foto, componer bien sigue siendo lo esencial. Me encanta fotografiar cisnes, y no es muy difícil porque nadan despacito, je. Este te quedó con unos colores increíbles, esos marrones…
Qué razón que tienes con eso que dices que desde la 30D han llovido muchos megapixels pero en cuanto a composición…no ha cambiado nada.
Muy bueno tu blog, por cierto. Me lo he suscrito al google reader que ultimamente no encuentraba blogs interesantes nuevos (de fotografía)…manías que tiene uno.
Saludos
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